¿Necesita una Tapa tu Terrario? Descubre las Respuestas Aquí

El Terrario: Un pedacito de naturaleza en casa

En 1829, el Doctor Nathaniel Bagshaw Ward, uno de muchos médicos que obtenían medicinas a partir de plantas como era la práctica común en aquel entonces, necesitaba tener hierbas medicinales siempre a mano. Sin embargo, en la Londres de la Era Industrial, la contaminación hacía esto casi imposible. Afortunadamente, el Dr. Ward también era coleccionista de insectos y un día capturó un gusano de seda envuelto en un capullo que colgaba de una ramita. Lo puso dentro de un frasco de vidrio, junto con un poco de tierra y moho, y para su grata sorpresa, observó que durante el día la humedad se evaporaba y se condensaba en el vidrio, goteando de nuevo hacia abajo para mantener un estado constante de humedad. En cuestión de días, brotó un helecho justo allí en el frasco. Fue un shock. Los helechos prácticamente habían desaparecido en la contaminada Londres. Concluyó que la humedad y la protección del frasco de vidrio permitieron que el helecho sobreviviera.

Este “Estuche Wardiano” es el precursor del moderno terrario, en el cual se pueden mantener plantas delicadas o cualquier tipo de planta en cada hogar, creando una envidia de plantas. Por lo general, se dividen en dos categorías: terrarios abiertos y terrarios cerrados.

Terrarios abiertos

Un terrario abierto proporciona una amplia circulación de aire y niveles bajos de humedad. No es hermético y no tiene un cierre ajustado o una tapa removible. En cambio, crea un espacio más contenido para que las plantas que requieren cuidados similares crezcan juntas. Es perfecto para variedades variadas de suculentas y cactus. Piensa en él como un mini desierto.

Terrarios cerrados

Un terrario cerrado, con una cubierta o tapa removible, proporciona una amplia humedad y puede crear su propio pequeño ecosistema. Las plantas dentro de un terrario cerrado liberan humedad que se condensa dentro del recipiente y gotea de nuevo en el suelo. Para un terrario cerrado, es mejor elegir variedades de plantas compactas, para reducir al mínimo la poda, y aquellas que prosperen en alta humedad, como los helechos o las orquídeas.

Nunca selle completamente herméticamente un terrario. Lo mejor es obtener una tapa que quede floja y permita que parte del aire escape para que las plantas puedan respirar. El sellado hermético de cualquier terrario es una invitación perfecta para que se forme moho y mate tus plantas. Asegúrate de que incluso con una tapa floja, una vez a la semana o así, abras el recipiente para fomentar la circulación de aire. El movimiento del aire impide las infecciones fúngicas y te ayuda a estar al tanto de cualquier cambio en tus plantas cuando ocurren. Déjalos airearse durante al menos una y hasta 24 horas y luego coloca la tapa de nuevo floja.

Consejos para plantar un terrario perfecto

  • Elige plantas que crezcan lentamente, lo que requerirá menos poda y es menos probable que sobrepasen el recipiente.
  • Elige un recipiente limpio y transparente para permitir el paso de la luz; recomendamos elegir uno de vidrio.
  • Antes de agregar tierra al terrario, coloca media pulgada o así de grava o rocas de lava en la parte inferior para crear un drenaje para el exceso de agua.
  • Cuando agregues la tierra, presiónala para eliminar cualquier bolsa de aire.
  • Organiza tus plantas en el interior, asegurándote de dejar espacio para nuevo crecimiento.
  • Una vez que las plantas estén en su lugar, utiliza un pincel (o cepillo de dientes) para eliminar el exceso de tierra de los lados del recipiente o de las hojas de tus plantas.
  • Coloca tu terrario en un lugar que reciba algo de luz solar o luz ambiente.
  • Los terrarios cerrados, por lo general hogar de plantas que prefieren alta humedad y luz moderada, deben mantenerse fuera del sol directo (un par de horas de sol completo pueden dañar fácilmente los contenidos del interior).
  • Los terrarios abiertos, por lo general hogar de plantas que prefieren condiciones secas y luz brillante, se pueden mantener en luz brillante, directa o indirecta, como en tu alféizar de la ventana.
  • riega directamente en la base de las plantas o en el suelo para que el agua pueda llegar a las raíces.
  • Haz lo posible por no regar en exceso tu terrario, ya que no tiene un agujero de drenaje por donde se libere el exceso de agua. Asegúrate de no empapar completamente la tierra (debe estar húmeda pero no empapada).
  • Recuerda que es mucho más fácil añadir agua a la tierra que quitarla.
  • Permite que un terrario cerrado respire cada 1-2 semanas quitando su tapa o manteniéndola un poco abierta durante un máximo de 24 horas.
  • Para que las plantas crezcan hacia arriba y llenen el espacio adicional, rota tu terrario cada 1-2 semanas.

Y recuerda, si estás combinando diferentes variedades de plantas, siempre elige plantas que prosperen en ambientes muy similares, es decir, plantas que prefieran la misma cantidad de luz solar, humedad y agua. Por ejemplo, nunca mezcles suculentas, que les gusta el calor y la sequedad, con musgo, que prefiere el frío y la humedad. En su lugar, mezcla suculentas con cactus, y mezcla musgo con helechos.

Leave a Comment

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Scroll to Top