Iberis: Características, variedades, cuidados y usos como planta medicinal

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Las especies arbustivas de floración son una excelente opción para completar espacios vacíos en un jardín. Entre ellas encontramos variedades muy resistentes y que nos brindan un gran valor ornamental.

Dentro de este grupo, el género Iberis destaca debido a su amplia distribución en todo el mundo y también por su reconocido valor medicinal.

Por lo tanto, en este artículo nos dedicaremos a conocer algunas curiosidades y una guía de cuidados del género de arbustos Iberis. Este género cuenta con varias especies que comparten características similares en cuanto a su mantenimiento, pero que ofrecen un alto valor ornamental.

Características principales de Iberis

El género Iberis incluye arbustos y plantas herbáceas de gran tamaño que se destacan por su espléndida floración. En este grupo encontramos variedades de hojas caducas y otras perennes, lo que las convierte en una opción ideal para tener un jardín completo durante el invierno.

Iberis pertenece a la familia Brassicaceae (brasicas), la misma clasificación que especies hortícolas comestibles como el brócoli o la coliflor. Sin embargo, estas plantas no tienen ninguna relación con los beneficios medicinales que ofrecen las especies de Iberis.

Una de las especies más conocidas de Iberis es la planta carraspique (Iberis sempervivens), así como Iberis amara, ambas con una impresionante floración durante la primavera y el verano.

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Floración

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Aspecto de la planta

El grupo de plantas Iberis se encuentra entre pequeños arbustos y plantas herbáceas de tamaño alto. Al menos para las 2 especies más destacadas (I. sempervivens e I. amara), pueden alcanzar hasta 30 cm de altura y son especies perennes que conservan sus hojas durante todo el año.

Sin embargo, estas condiciones solo se logran en el clima mediterráneo con inviernos suaves y sin heladas (excepto en días específicos de frío).

Se pueden plantar en grupos o distribuidas de forma individual por el jardín. Es común encontrarlas en jardines de rocalla, donde producen numerosas inflorescencias blancas que se agrupan en pequeños ramos.

Principales variedades del género Iberis

El género Iberis incluye hasta 50 especies arbustivas, cada una con una floración peculiar y atractiva de gran valor ornamental.

No obstante, las especies arbustivas más comunes son las siguientes:

  • Iberis amara
  • Iberis gibraltarica
  • Iberis odorata L.
  • Iberis pectinata
  • Iberis pruitii
  • Iberis sempervirens
  • Iberis tenoreana
  • Iberis umbellata

Guía de cuidados de Iberis

A continuación, presentamos algunas características básicas para el cuidado de nuestra planta Iberis. Su cultivo es muy sencillo, ya que es considerada una especie resistente. Simplemente al cultivarla en zonas mediterráneas, habremos realizado un gran avance en su cuidado.

Ubicación y climatología

Como mencionamos anteriormente, las plantas del género Iberis crecen en condiciones climáticas mediterráneas, con inviernos suaves, veranos calurosos y escasas precipitaciones a lo largo del año.

La ubicación de la planta puede ser en cualquier zona soleada del jardín con excelente iluminación durante la mayoría del día.

En cuanto a las temperaturas, estas especies son relativamente sensibles a las bajas temperaturas, aunque su rango de tolerancia es amplio.

En áreas geográficas más frías, puede resultar difícil que algunas especies de este género sean perennes.

Características del suelo

Iberis se adapta muy bien a cualquier tipo de suelo, pero prefiere aquellos con un buen drenaje y bajos niveles de arcilla.

La condición más importante es asegurar una óptima filtración del agua, ya que estas plantas son resistentes a suelos salinos, pedregosos e incluso con un pH alcalino.

Antes de trasplantarla, es recomendable añadir materia orgánica para mejorar la futura floración. Un mantillo de compost puede mejorar el drenaje del suelo y la disponibilidad de nutrientes.

Cómo regar Iberis en el jardín

Para una especie de clima mediterráneo, se recomienda regarla escasamente en otoño e invierno, y un poco más en los meses cálidos.

Esta planta puede sobrevivir con un riego semanal, pero en zonas con inviernos suaves y temperaturas que superan los 16-18 ºC durante la mayor parte del año, se pueden necesitar hasta 2 riegos por semana.

En las estaciones de primavera y verano, cuando las temperaturas pueden alcanzar más de 30 ºC, es necesario regar al menos tres veces a la semana, después de que el sustrato haya perdido la mayor cantidad de humedad.

La manera más práctica y común de regar los grupos de arbustos o hierbas como Iberis es mediante el riego por goteo, utilizando un emisor de 4 L/h por planta.

Si plantamos varias especies juntas para formar un grupo, debemos colocar un emisor cada 30 cm para asegurar un riego uniforme y cubrir toda la zona húmeda.

Consideraciones sobre la fertilización

En nuestro jardín, el aporte anual de material orgánico alrededor de los tallos principales nos dará buenos resultados.

Sin embargo, recomendamos complementar el aporte de nutrientes antes de la floración para promover una mayor cantidad y duración de las flores durante el verano.

Además del aporte regular de material orgánico a todas las plantas, podemos utilizar dos tipos de fertilizantes.

  • Fertilizante líquido: utilizaremos un fertilizante equilibrado para plantas con flores, con una relación 2-1-3 de nitrógeno, fósforo y potasio. En general, se recomienda añadir 1 ml de fertilizante por litro de agua de riego. Durante la primavera y el verano, se debe utilizar el fertilizante en cada tercer riego.
  • Fertilizante sólido: si no tenemos un sistema de inyección (Venturi) para el riego por goteo, podemos utilizar fertilizantes en gránulos que se esparcirán alrededor de los troncos. Estos fertilizantes se disolverán lentamente con la humedad ambiental y el riego por goteo. Se recomienda aplicarlos antes de la floración (20-30 g/m2) una vez al mes.

Multiplicación

La forma más fácil de multiplicar un Iberis y obtener nuevas especies es a través de la siembra de semillas. Estas semillas son fáciles de adquirir en sobres y tienen una alta tasa de germinación.

La siembra se puede realizar de forma dispersa, directamente en el suelo del jardín y a partir del final del invierno o el comienzo de la primavera (evitando las heladas).

Cada paquete de semillas de Iberis puede contener aproximadamente 300 semillas, por lo tanto, será suficiente para crear un hermoso jardín de rocalla y un interesante grupo de flores para los meses de primavera y verano.

Plagas y enfermedades

Iberis no es una variedad de plantas muy afectada por plagas o enfermedades. Solo en condiciones especiales puede ser atacada por insectos chupadores como pulgones (que se encuentran en los nuevos brotes) o trips (que se encuentran en las flores).

En general, estas plagas se controlan naturalmente con la ayuda de la fauna auxiliar de nuestro jardín o mediante el uso de tratamientos con jabón potásico aplicados directamente sobre la plaga.

En cuanto a enfermedades, solo en casos de mal drenaje y acumulación de agua, podría verse afectada por enfermedades de la raíz y el cuello.

Guía de poda de Iberis

Después de la floración de Iberis, es normal que acumule flores y tallos secos que deben ser eliminados. Se adapta bien a la poda y con ella promoveremos una futura floración más abundante.

Por lo tanto, antes de la llegada del frío invierno, se recomienda realizar cortes sustanciales en los tallos florales, dándole forma a la planta y eliminando los tallos que sobresalgan.

No es necesario preocuparse demasiado, ya que brotará con facilidad en primavera.

Uso de Iberis como planta terapéutica

El carraspique, conocido vulgarmente como Iberis sempervivens o iberis amara, solía ser considerado una planta con propiedades medicinales. Sin embargo, su uso en la actualidad se encuentra bastante restringido y principalmente se cultiva como una especie ornamental.

La Iberis tenía diversas partes que eran aprovechadas, aunque las flores y las semillas eran las que contenían en mayor medida los componentes activos. Ambas contienen las siguientes sustancias terapéuticas:

  • Glucoiberósido
  • Glucoqueirolósido
  • Glucorhamnósido (presente en una mayor concentración en las flores)

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